El camino se hace largo, mas no eterno, y entre copla y copa, vivas y carreras se intercalan esos pequeños momentos en los que, otra vez, sus miradas vuelven a encontrarse entre la gente, a veces con todo el camino de por medio, otras veces separados por la distancia de una amiga que baila, o por el roce de sus brazos en el transcurso de direcciones opuestas. Inspira, uno, dos, tres, cuatro, se ha parado el tiempo.
Y cae la noche entre rosario y fuegos, y entre tanta gente y tanta ermita vuelven a encontrarse y, poco a poco, se van quedando solos, y amparados bajo una higuera y en la soledad buscada por la mirada, se abrazan. Inspiran, uno, dos, tres, cuatro… Se les ha parado el tiempo y sus labios se acercan de nuevo.
Las bellas historias, amigo historiador, también se repiten, y en Lepe, cuando se viste de mayo.
3 comentarios:
Noto algo prohibido, o sácame del error, como si supiesen que no deben estar juntos. quizá ella no sea libre? o él...o porque sean dos mujeres que se amen, o dos hombres, aún no están superadas todas las barreras, aunque las leyes digan que si. De todos modos veo miedo y pasión, represión,etc...
Les recomiendo que echen abajo los perjuicios, solo se vive una vez y lo que tenga que pasar...que pase, claro que deben ser los dos los que lo hagan, sino no surtirá efecto.
Pero no se puede vivir con miedo a nada. Pasa factura al final.
bonito relato, como siempre
saludos y beso de marvision
La historia está basada en las fiestas de la Romería de Lepe que, hasta este año, se desarrollaban durante tres días, pasando a ser 4 en esta edición.
No hay nada prohibido, es simplemente una historia de amor entre dos personas que se enamoran en Romería. Está personificada en un hombre y una mujer, pero no especialmente por nada. Podían ser perfectamente dos hombres o dos mujeres, el amor es libre.
Los personajes se conocieron (o se re-conocieron o se fijarone el uno en el otro) el primer día de Romería, que se desarrolla en Lepe. La ofrenda de flores. De este capítulo sólo conocemos que estuvieron juntos, o que coincidieron en varios grupos de amigos etc... Hablaron poco pero ya se clavaron con las miradas.
La historia prosigue a la mañana siguiente en el camino de ida (se recorren 5 kilómetros hasta la ermita de El Terrón, donde se desarrolla el resto de las fiestas). De este capítulo sabemos que se vuelven a encontrar, que vuelven a fijarse, que siguen coqueteando con las miradas aunque estén separados por el inmenso gentío que camina juntos, que canta y que baila, que se pierde y se reencuentra.
"Endosado entre la gente botella al hombro y tras haber repuesto unas horas de fuerzas se encuentra con el resto del grupo. El caldito del puchero de la señora María sabe a gloria y el rebujito, aún fresquito, devuelve el sabor de la noche y las ganas de guitarra y baile(...)" "(...)Allí está de nuevo, más guapa que la noche anterior, y con sus ojos en los suyos. (...)"
"(...)El camino se hace largo, mas no eterno, y entre copla y copa, vivas y carreras se intercalan esos pequeños momentos en los que, otra vez, sus miradas vuelven a encontrarse entre la gente, a veces con todo el camino de por medio, otras veces separados por la distancia de una amiga que baila, o por el roce de sus brazos en el transcurso de direcciones opuestas(...)"
La historia continúa en esa noche en la que se celebra el rosario de antorchas y la quema de fuegos artificiales. Por fin la magia de las fiestas, de la naturaleza y de la noche propicia que se recojan los frutos del amor que sembraron días antes, y que como en toda historia de amor, necesita de un proceso.
"Y cae la noche entre rosario y fuegos, y entre tanta gente y tanta ermita vuelven a encontrarse y, poco a poco, se van quedando solos, y amparados bajo una higuera y en la soledad buscada por la mirada, se abrazan"
Aún les queda el camino de vuelta, que no está recogido en la historia. Comienza a las 20 h del lunes para llegar a Lepe sobre las 23 ó 00 horas de la noche. Lo más probable es que hagan juntos el camino de vuelta, abrazados y dejándose llevar por la luna, perdiéndose entre el trigo, riendo y amandose entre las miradas de felicidad y asombro de los amigos, emborrachandose de amor y rebujito (vino fino con seven up).
És el principio de una historia que qizás sólo ha durado tres días... o no.
Finalmente viene mi puntillita, que nada tiene que ver con la historia de amor en sí. En el mes de las elecciones, de la crispación, del recurdo de la historia pasada, de los malos y los buenos, de la división de las personas por lo que vota... En este mes en el que la historia se repite, también se repite el amor, la paz y la comunión entre las personas.
"Las bellas historias, amigo historiador, también se repiten, y en Lepe, cuando se viste de mayo."
Estás invitada, amiga marvisión, a la próxima Romería de Lepe. Se celebra el segundo fin de semana de mayo.
Paco, tienes un premio en mi casa...pásate a recogerlo. marvision
besos
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